Reto semanal Modulo Nº2 - Formas y Tipos de Discriminación
Buenos días,
Después de consultar varios programas de buenas prácticas y tener una gran indecisión sobre cual escoger porque todos me parecían muy interesantes, finalmente me he decidido por el siguiente por considerarlo bastante necesario:
"Programa para la organización, desarrollo e impartición de cursos dirigidos a promover la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres en el ámbito penitenciario"
Esta buena práctica se puso en marcha en el año 2013 por la Comunidad de Madrid en colaboración con la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias del Ministerio de Interior y cofinanciado al 50% por el Fondo Social Europeo, en el marco del Programa Operativo de la Comunidad de Madrid, y actualmente se encuentra vigente en la edición 2022-2024, con la impartición de 90 cursos a razón de 30 por año.
Los cursos se realizan en los siguientes centros penitenciarios: Madrid I Mujeres (Alcalá de Henares), Madrid II (Alcalá de Henares), Madrid III (Valdemoro), Madrid IV (Navalcarnero), Madrid V (Soto del Real), Madrid VI (Aranjuez) y Madrid VII (Estremera), y en los centros de inserción social CIS Melchor Rodríguez García (Alcalá de Henares), CIS Josefina Aldecoa (Navalcarnero) y CIS Victoria Kent (Madrid).
Analiza el ámbito o ámbitos en el que actúa esta buena práctica.
El programa tiene como objetivo cambiar las pautas sociales que contribuyen al mantenimiento de relaciones desiguales entre la población reclusa y formar en valores y prácticas basadas en el principio de igualdad.
Sobre todo se presta especial atención a la población reclusa femenina, con mayor vulnerabilidad, y tiene como objetivo común modificar los modelos de conducta culturales de hombres y mujeres que provocan desigualdades, y eliminar los prejuicios y las prácticas culturales basadas en la idea de inferioridad o superioridad de uno u otro sexo, mediante la integración de la perspectiva de género.
También se pretende aumentar el conocimiento y las posibilidades de inserción laboral tras la salida de las personas reclusas de los centros penitenciarios y sensibilizar y concienciar sobre la responsabilidad personal y profesional del respeto a los derechos humanos en todos los actos y en todas las circunstancias.
La metodología de impartición de estos cursos de igualdad combina la parte teórica de formación e información con otra de carácter práctico y participativo, utilizando técnicas abiertas que promueven la interacción entre las personas participantes.
Comenta, si conoces la buena práctica, el impacto y resultados que ha tenido o tiene.
No conocía este programa, pero para hacer el reto semanal he estado leyendo sobre el mismo y observo que los resultados han sido muy satisfactorios.
Desde el inicio, en el año 2013, ha contado con una gran acogida por lo que las actividades se han ido incrementando progresivamente de 23 a 30 cursos anuales. En 2015 participaron 410 personas (199 mujeres y 211 hombres). Y desde 2013 hasta la actualidad se han impartido más de 280 cursos a los que han asistido 4.600 personas, con porcentajes muy similares de mujeres y hombres.
La acogida ha sido muy favorable en todos los centros penitenciarios, pero en especial en el Centro Penitenciario Madrid I (Alcalá Mujeres), donde se celebran más ediciones tanto por la demanda de la internas como de la propia dirección del centro.
Qué puntos fuertes y qué debilidades consideras que tiene esta buena práctica
Después de estudiarlo detenidamente creo que esta buena práctica tiene mas puntos fuertes que debilidades.
Fortalezas:
- Es un Plan prolongado en el tiempo y con futuro, se inició en el año 2013 y actualmente se encuentra vigente en la edición 2022-2024.
- Ha tenido una muy buena acogida en todos los centros penitenciarios por lo que desde el año 2015 se ha incrementado el número de cursos de 23 a 30.
- Este tipo de cursos son muy necesarios y enriquecedores para fomentar la igualdad entre hombres y mujeres en las prisiones. Hay que tener en cuenta que el sistema penitenciario está diseñado para los hombres porque son la mayoría, un 92,7%, ya que las mujeres representan un 7,3% de la población reclusa. De las 69 prisiones que hay en España solo 4 son de mujeres. Y los centros de hombres donde se incluyen módulos de mujeres no satisfacen las necesidades básicas de las mismas (hay que imaginar una prisión de 1000 hombres y 69 mujeres, todo lo que sucede allí dentro, los accesos a talleres y actividades sobre todo pensado para los hombres).
Debilidades:
No se me ocurre ninguna, por comentar algo, se podría aumentar la dotación económica para ampliar las plazas en los cursos más demandados.
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